Una técnica analítica llamada espectroscopía de reflectancia ha demostrado su utilidad como herramienta para estudiar los efectos de la contaminación atmosférica en la vegetación. En particular, los investigadores sugieren que la técnica podría aplicarse más ampliamente en la región mediterránea, para estudiar los efectos del cambio climático y la contaminación del aire, lo que será perjudicial para el crecimiento de los cultivos y otras formas de vegetación. También podría usarse como una técnica de biomonitoreo más general para evaluar los niveles de contaminantes en el medio ambiente. La investigación ha sido publicada por un grupo de investigadores italianos y estadounidenses bajo el título "Reflectance spectroscopy: a novel approach to better understand and monitor the impact of air pollution on Mediterranean plants" en el número de julio de 2017 de la revista Environmental Science and Pollution Research.
Además de investigar cómo la contaminación del aire y otros factores estresantes afectarán a las plantas y los ecosistemas en el Mediterráneo, la técnica sirve para evaluar el efecto de las políticas ambientales. La detección remota óptica (una gama de técnicas de imagen que pueden diferenciar objetivos o superficies) es ideal para este propósito, ya que se puede utilizar para dar rápidamente información sobre un área grande, incluido el funcionamiento de las plantas. En particular, una de estas técnicas, conocida como espectroscopia de reflectancia, podría ser un método excelente para controlar las respuestas de la vegetación a la contaminación del aire, proponen los investigadores. Esta publicación revisa su uso para detectar y evaluar los efectos de la contaminación del aire en las plantas, comenzando con un historial de espectroscopía de reflectancia y luego resumiendo los estudios relevantes usando la técnica.
La espectroscopía es una rama de la física que se ocupa de los espectros electromagnéticos (el rango de longitudes de onda de la radiación electromagnética, los que son visibles cuando se los refleja son comúnmente conocidos como colores). La radiación puede ser reflejada, transmitida o absorbida por la superficie de la vegetación. Los dispositivos espectroscópicos se pueden usar para medir la reflectancia: la proporción de radiación reflejada desde una superficie a la cantidad de radiación que golpea la superficie. Las propiedades de la planta, como la estructura física, el contenido de agua y las respuestas al estrés, pueden deducirse de la reflectancia, aunque están sujetas a cierta inexactitud.
La espectroscopía ofrece una alternativa al análisis bioquímico, donde el tejido vegetal se recolecta e investiga en un laboratorio. Las ventajas de la espectroscopía sobre este tipo de análisis estándar son que es rápido, demorando solo unos segundos; no es destructivo, deja las plantas intactas, lo que permite mediciones repetidas en el mismo tejido; y es relativamente barato. Se puede usar a gran escala, en muchas plantas, y se puede ampliar para estudiar paisajes completos (aunque este proceso es imperfecto, por ejemplo, la detección remota puede no detectar vegetación oculta).
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