lunes, 22 de abril de 2019

Los edificios comerciales europeos tendrán que bajar las emisiones más de un 80 %

El sector inmobiliario comercial de Europa deberá reducir sus emisiones de carbono en más de un 80 % desde ahora y hasta 2050 para cumplir con los objetivos del Acuerdo climático de París. Esta estimación emana del primer informe elaborado por expertos de España, Alemania, Reino Unido y Países Bajos, que participan en el proyecto CRREM (Monitor del riesgo de emisiones de CO2 en el sector inmobiliario), financiado por el programa H2020 de la Unión Europea (UE).

La política europea contra el cambio climático se articula en torno al Acuerdo de París, que tiene como objetivo evitar que el incremento de la temperatura media mundial supere los 2 grados centigrados  respecto a los niveles preindustriales y busca, además, promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no rebase los 1,5 grados. Lo cual implica que el sector inmobiliario comercial podrá emitir como máximo la cantidad de 24 millones de toneladas de carbono hasta 2050. Según Paloma Taltavull, catedrática de Economía Aplicada en la Universidad de Alicante, la cifra se habrá alcanzado en 2039 según las previsiones de los expertos del proyecto.

Para prevenir un aumento de la temperatura global por encima de los 2 o los 1,5 grados, se calcula que las emisiones de carbono deberían reducirse un 78 % y un 91 %, respectivamente, desde ahora y hasta 2050. Según los acuerdos internacionales, los edificios de la Unión Europea tendrán que ser sostenibles para 2030.

Alrededor de un 40 % del volumen total de emisiones de carbono que se registra en la actualidad procede de los edificios. De ese porcentaje, entre el 23 % y el 24 % tiene su origen en viviendas residenciales y el resto, en inmuebles comerciales, detalla la experta española.

Los expertos del proyecto CRREM, que empezó en 2018 y durará hasta 2021, plantean desarrollar una herramienta para las empresas, que estime las inversiones necesarias para reducir las emisiones en los edificios comerciales, lo que permitirá a éstas calcular la rentabilidad o no de ese proceso inversor y, en función de ello, decidir si siguen utilizando o no sus inmuebles. Leer más

domingo, 14 de abril de 2019

El CO2 de los sectores sujetos al régimen de comercio de derechos de emisión desciende más de un 6% en 2018

El régimen de comercio de derechos de emisión de la UE (RCDE-UE) constituye la principal herramienta de la UE para regular las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la industria, generadores de electricidad y operadores aéreos. Cubre las emisiones de más de 11.000 instalaciones fijas en los 28 Estados Miembros, Islandia, Noruega y Liechtenstein, así como las emisiones de los vuelos realizados entre dos aeropuertos europeos.

Las emisiones de gases de efecto invernadero cubiertas por este régimen en España suponen alrededor del 40% del total nacional.

Los datos verificados de emisiones correspondientes a los sectores sujetos al régimen europeo de derechos de emisión (industria, generadores de electricidad y operadores aéreos) revelan que el CO2 equivalente ha descendido más de un 6% en 2018 en relación al año anterior. Así, las instalaciones industriales y plantas de generación de electricidad han emitido 127,3 millones de toneladas de CO2 equivalente en el año 2018, es decir, un 6,3% menos que en 2017.

En España, este régimen afecta a más de 800 instalaciones fijas y cerca de 30 operadores aéreos activos. Las emisiones de gases de efecto invernadero cubiertas por este régimen en España suponen alrededor del 40% del total nacional.

La reducción de las emisiones de las instalaciones sujetas a este régimen en 2018 se debe principalmente al buen comportamiento del sector de generación eléctrica, que ha registrado una reducción de sus emisiones de GEI del 15%, frente a los datos del año pasado, cuando las emisiones procedentes de la generación de electricidad aumentaron un 18,8%. En 2018, todas las tecnologías de generación fósil reducen sus emisiones. Así, las emisiones de centrales térmicas de carbón disminuyen un 17%, mientras que las correspondientes a ciclos combinados de gas natural lo hacen en un 18%.

El buen comportamiento del sector de generación eléctrica tiene su origen, como principal razón, en la elevada hidraulicidad del año 2018. Según datos de Red Eléctrica de España, la generación eléctrica hidráulica fue en 2018 un 85% superior a la de 2017. También la generación eólica aumentó, si bien de forma más moderada: un 3% más que en 2017.

En los sectores industriales se observa un ligero aumento de las emisiones en 2018, de un 2%. El comportamiento de los distintos subsectores industriales es desigual, si bien las emisiones de los grandes subsectores industriales, refino de petróleo, fabricación de cemento y siderurgia, aumentan en mayor o menor medida. Leer más

lunes, 8 de abril de 2019

Los océanos absorben el 31% del CO2 generado por el hombre

Un estudio internacional con participación de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha determinado que los océanos han capturado de la atmósfera 34 gigatoneladas  de dióxido de carbono generado por el hombre entre 1994 y 2007. Los resultados del estudio, liderado por el profesor Nicolas Gruber, del centro ETH de Zurich, y publicado en Science, indican que esta cifra se corresponde con el 31% de todo el CO2 antropogénico emitido durante ese tiempo.

Los océanos funcionan como un gran sumidero de CO2. Este sumidero oceánico es crucial para los niveles atmosféricos de este gas; sin este sumidero, la concentración de CO2 en la atmósfera y el alcance del cambio climático antropogénico sería considerablemente mayor. Por tanto, determinar qué parte del CO2 generado por el hombre es absorbida por el océano ha sido una prioridad para los investigadores del clima.
Este porcentaje de CO2 capturado por los océanos ha seguido relativamente estable en comparación con los 200 años precedentes, pero la cantidad total ha aumentado sustancialmente. Esto se debe a que mientras la concentración atmosférica de CO2 aumenta, el sumidero oceánico se refuerza más o menos proporcionalmente: cuanto más CO2 hay en la atmósfera, más es absorbido por los océanos; hasta que al final se queda saturado.Hasta ahora no se ha llegado a ese punto.
Moderando el ritmo del calentamiento global, el sumidero oceánico de CO2 proporciona un importante servicio para la humanidad, pero tiene su contrapartida: el CO2 disuelto en el océano acidifica el agua, lo que tiene graves consecuencias para muchos organismos marinos.

No todo el dióxido de carbono generado durante la combustión de los combustibles fósiles se queda en la atmósfera y contribuye al calentamiento global. La otra parte se captura en los oceános y en los ecosistemas terrestres.

El océano captura del CO2 en dos fases: primero, el CO2 se disuelve en la superficie del agua. Luego la circulación oceánica lo distribuye: corrientes oceánicas y procesos de mezclado transportan el CO2 disuelto desde la superficie a las profundidades del océano, donde se acumula a lo largo del tiempo.

Los resultados del estudio se basan en un estudio global del CO2 y otras propiedades químicas y físicas en los diversos océanos, medidas desde la superficie hasta las profundidades de hasta 6 kilómetros. Científicos de 7 países han participado en este proyecto internacional que empezó en 2003. Globalmente han efectuado más de 50 singladuras de investigación hasta 2013, cuando fueron puestos en común todos los datos. Leer más

miércoles, 3 de abril de 2019

Aprobado el Índice Nacional de Calidad del Aire

El Índice Nacional de Calidad del Aire, ha sido publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), con fecha de 28 de Marzo de 2019.

Una de las medidas incluidas en el Plan Nacional de Calidad del Aire 2017-2019 (Plan Aire II) consistía precisamente en la «elaboración de índices sencillos de calidad del aire para el público general que permitan tener acceso de forma sencilla a información sobre la calidad del aire de cualquier zona del territorio nacional.

El Índice de Calidad del Aire Europeo fue puesto en marcha en noviembre de 2017 por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) y la Comisión Europea.

El índice europeo muestra la situación en materia de calidad del aire a nivel de cada estación, basándose en cinco contaminantes: partículas en suspensión (PM2,5 y PM10), ozono troposférico (O3), dióxido de nitrógeno (NO2) y dióxido de azufre (SO2). El índice establece cinco niveles de calidad del aire en función del resultado de dicho índice: buena, razonable, moderada, pobre y muy pobre.

Muchos de los gestores de las redes regionales y locales de España de calidad del aire disponen ya de indicadores o índices propios mediante los que informan al público de forma sencilla y visual del estado de la calidad del aire. No obstante, tales indicadores son muy heterogéneos, por lo que la existencia de un Índice Nacional de Calidad del Aire permitirá la comparación entre diferentes regiones, representar la calidad del aire de una manera fácilmente entendible por los ciudadanos contribuyendo al acceso del público a dicha información ambiental de una manera clara. 

El índice se basa  en los siguientes contaminantes: 

a) Partículas en suspensión PM10 
b) Partículas en suspensión PM2.5
c) Ozono troposférico (O3 )
d) Dióxido de nitrógeno (NO2 )
e) Dióxido de azufre (SO2 )

 El indice obtenido con los datos recogidos en cada una de las estaciones de medición se publicará en la sede electrónica del Ministerio para la Transición Ecológica. Esta información se actualizará de forma continua, a medida que se reciban los datos de las estaciones de medición. El acceso al contenido del índice será público, libre y gratuito.

En los contaminantes NO2 , O3 y SO2 , se utilizarán los valores de concentraciones horarias para el cálculo del índice. Por lo que respecta a PM10 y PM2.5, el cálculo se hará en base a la media móvil de las 24h anteriores.

La escala para los contaminantes es la siguiente:











Los rangos  medidos en µg/m3 para cada contaminantes son:


El Índice reflejará el peor nivel de cualquiera de los cinco contaminantes. Leer más